“Nuestro departamento lo han desmontado entero”, denuncia Irene. Cerca de 70 trabajadores de la empresa King, propiedad del gigante norteamericano Microsoft, se han plantado este jueves frente al edificio de la empresa desarrolladora de videojuegos, ubicada en el barrio barcelonés de Poblenou, para protestar contra un ERE (expediente de regulación de empleo), que ha afectado a una parte de la plantilla. Los trabajadores de la empresa —entre ellos varios desarrolladores, artistas, programadores o ingenieros que han trabajado, entre otros, en el popular videojuego Candy Crush— denuncian que estos recortes afectan a 75 personas, cerca de un 12% de la plantilla, “en un momento en el que la compañía registra beneficios millonarios”.